martes, 23 de octubre de 2012

Vendedores de seguros: ¡¡tírense a un pozo!!

Desde que sabemos que existe la humanidad, y en particular el comercio, siempre han existido vendedores y compradores; donde los primeros, en su ambición a la hora de ejercer terminan convirtiéndose (en muchas ocasiones) en usureros. Esa situación no ha cambiado para nada hoy en día, sin embargo, la usura desde mi punto de vista ya te llega directamente por teléfono u otras formas, haciéndote perder el tiempo, y si no te pones buzo, hasta dinero.

En este caso, hablaré sobre la venta de seguros que no sirven para nada, siendo que se ha convertido en una especie de "comercio informal" de seguros por teléfono que son ofrecidos hasta por la tienda más "pedorra" en donde tengas una tarjeta de crédito, o por alguna compañía que te proporcione otro servicio (teléfono, tv por cable, etc.).

Los más comunes son seguros de vida, seguros de daños en el hogar, seguro vial, seguro contra robo (asalto), seguro contra fraudes, seguro ... bueno... hasta porque la mosca pasa te los ofrecen. Y a cambio pagas una cantidad mensual que comienza desde al rededor de los $30 pesos mensuales y va aumentando según la cobertura, y por supuesto, según la exclusividad de la tarjeta o la compañía que te lo ofrezca. Ademàs la táctica de venta es muy simple, hablan a la persona cuyos datos se encuentren en su base (de datos, valga la redundancia) y te ofrecen maravillas a través de los seguros, sin dejarte hablar, para que "sin que te des cuenta" lo aceptes y te logren hacer un cobro mensual.

La cuestión que quiero apuntar sobre estos seguros es la falta de seriedad de las compañías cuya ausencia de ética simplemente es aberrante y a veces parece que no tiene límites a la hora de buscar cómo ganar dinero.

El primer punto a tratar aquí, es la verdadera utilidad de esos seguros. Para empezar, son seguros o servicios que el tarjeta-habiente jamás pidió, y que por lo tanto, no necesita. Si yo nunca fui a una aseguradora a comprar un seguro para protegerme contra inundaciones o terremotos, ¿qué les hace pensar que ahora que me lo ofrecen, en realidad lo necesito?

Pensemos en el hecho de que los seguros son simplemente una mercancía intangible, es decir, un servicio que de no ocuparse (o necesitarse), entonces simplemente hace tirar dinero a la basura. Dense cuenta de que la compra de un servicio de ésta índole, sugiere la revisión de clausulas que nos hagan ver si realmente nos conviene o no tenerlo.

La función de un seguro, no es disminuir el riesgo de que te pase lo que estas asegurando, sino disminuir el costo por el riesgo de que algo suceda; es decir, estar mejor preparado para algo que realmente temas pueda pasar. Por lo tanto, si no lo aseguraste antes, para que lo harías en el momento en que te hablan por teléfono a tu casa para ofrecértelo.

Realmente, la compra de un seguro, así como la compra de un coche, de una casa, o hasta de un par de zapatos, no debe hacerse viendo lo primero que te ofrecen. Un comprador también debe ser atento a estas cuestiones, comparar precios, comparar beneficios, y optar por la mejor opción. Además la venta de seguros express no permite al consumidor pensar más que en los beneficios que te ofrecen por teléfono, siendo que existen cláusulas que especifican tremendamente el cobro de las cantidades que te ofrecen originalmente.

Por ejemplo, en el caso de los seguros por robo de celular, bolsa, tarjetas, en muchas ocasiones especifican "robo con violencia"; o sea, que si te lo "volaron" en el metro o el camión y no te diste cuenta, ya valiste. Me parece que el beneficiario tiene que ser amenazado con un arma o algo por el estilo, hacer su denuncia ante el Ministerio Público, y mucha suerte para que no te descubran si hiciste trampa en tu declaración.
Además, en caso de que proceda tu denuncia para el cobro del seguro, la aseguradora puede no darte la cantidad completa que te mencionaron a la hora de contratar el seguro, basándose en algún estándar o en alguna cláusula. Por ello es tan importante que revises todo antes de contratar un seguro; en pocas palabras, debe ser un asunto serio y no tomarlo a la ligera como lo hacen las compañías que te hablan por teléfono, o tal como me ha tocado últimamente, en la misma caja del banco ¿!Pero qué les sucede?!

Ahora el segundo punto, la gran, gran, falta de ética de las personas y las compañías. Hemos visto que contratar un seguro es una cuestión que toma tiempo, pues también tomará dinero el cual debemos ver como inversión; y a su vez, una inversión es una decisión que no puede tomarse a la ligera porque se supone consumirá parte de nuestros ingresos y por ende que los beneficios que nos debe otorgar sean proporcionales a lo que se esté pagando.

Bueno, sabiendo esto, ¿por qué las empresas se empeñan en molestar a los consumidores con esta clase de llamadas telefónicas de usura? Pues porque se defienden diciendo que no están haciendo nada ilegal, cuando en realidad están actuando con dolo para obtener beneficios, lo cual es ilegal, sobre todo cuando se trata de personas que no saben qué hacer para rechazar estas usuras.

La táctica, pues es la más antigua de todas, hablar y hablar sin parar para no dejar a la otra persona tiempo de pensar o reaccionar para rechazar el ofrecimiento. En muchas ocasiones simplemente después de la gran letanía, solamente terminan diciendo cosas como:

1) ... por favor, anote el teléfono que le voy a dictar para que pueda cobrar "sus beneficios" por el seguro...

2) ... entonces necesito confirmar sus datos para darlo de alta, su nombre completo es fulanito de tal...

3) ...a partir del próximo mes le estará llegando a su estado de cuenta el cobro del seguro...

Como pueden ver, en ninguna de las tres dan la opción al consumidor para decir "si" o "no" quiero de manera explícita, y es ahí donde se aprovechan de la pena, la falta de recursos lingüísticos  o aunque suene feo, de la ignorancia de las personas para poder rechazar este "ofrecimiento" que aunque se haga con las palabras más amables posibles, es una total y completa grosería por parte de los telefonistas.

Y aparte de ser una grosería para los clientes por parte de sus propios bancos o tiendas, nos da otra cosa en que pensar. La falta de ética de las mismas personas que hablan por parte de las compañías para actuar de esta forma tan descarada con las personas. ¿Realmente un salario de $6000 mensuales (si bien les va) por andar moliendo gente todo el día, vale tu dignidad como trabajador? ¿En serio no ven que los call center los ven como monos de circo haciendo el trabajo sucio? ¿Les gustaría a ustedes o sus familiares, salier afectados con una llamada de este tipo? ¿Dónde está su responsabilidad social? o sea, ¡¡mandar al demonio a compañías que solo les dan trabajo por hacer esta clase de barbaridad!!

Y después ¿qué provoca este comportamiento?, pues que la gente realmente se moleste, que sea grosera con los telefonistas por cualquier causa, y que la neurosis general aumente mientras las aseguradoras y grandes corporativos se "orinan de la risa" por la ganancias acumuladas por un servicio donde las ganancias pueden ser al 100% por quienes no reclaman ningún servicio del seguro.

En realidad, debería darles más pena a estos usureros "vender" de esta manera, que a los consumidores mandarlos al demonio por intentar tratarlos como bobos. Por ello, si les hablan por teléfono, y no les dan la opción de decir sí, o no, directamente cállenlos diciendo que no quieren o no les interesa. Nunca tengan pena de decir que no quieren, o que no tienen por qué comprar nada que ustedes no pidieron.

Cada que les hablen de esa manera, digan NO, y verán como los dejan de molestar. No tengan pena, al contrario, háganles ver qué es realmente una grosería y puede llegar a ser un delito obligar a alguien a comprar algo que no quieren. Es un abuso intentar exprimir a las personas desde todos los ángulos.

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